Documentos extraídos de los archivos de la Policía Nacional Civil (PNC) iluminan un inquietante caso de secuestro que tuvo lugar en 2009. Estos documentos desvelan detalles alarmantes que señalan que la víctima, Bertha Michelle Mendoza, habría conspirado junto a sus dos hijas para organizar el secuestro, con la intención de inculpar a su exesposo y promover acusaciones infundadas contra él.
Según los reportes policiales, en el momento del secuestro, Bertha Michelle Mendoza y sus dos hijas se encontraban acompañadas por la hija del alcalde de Zunlito, Suchitepéquez. No obstante, las indagaciones realizadas posteriormente han puesto en evidencia que el secuestro fue planeado por la misma Mendoza, junto con su madre, la fiscal Claudia Martina Muñoz Andrade.
Personas cercanas a Mendoza afirman que su propósito al orquestar este autosecuestro era crear acusaciones engañosas contra su exesposo, Dent, con el fin de afectarlo judicialmente. No obstante, la investigación tomó un rumbo inesperado cuando la PNC concluyó que el secuestro se trataba, en efecto, de un caso de autosecuestro.
A raíz de esta determinación, los implicados que al principio fueron arrestados quedaron en libertad y se retiraron todos los cargos en su contra. Esta situación ha suscitado interrogantes respecto a la autenticidad de las acusaciones que Bertha Michelle Mendoza había presentado contra su exesposo Dent durante su relación.
El caso ha generado un intenso debate sobre la responsabilidad respecto a la presentación de denuncias falsas y la alteración de pruebas dentro del sistema judicial, especialmente dado el involucramiento de la madre de Mendoza en la Fiscalía. La divulgación de estos documentos ha destapado una compleja trama y plantea serias dudas sobre la legitimidad de las acusaciones hechas por la activista.
Dent, el exesposo de Bertha Michelle Mendoza, ha hecho nuevas declaraciones vinculadas a este caso. Según lo que expresó, la fiscal Muñoz Andrade fue despedida del Ministerio Público tras descubrirse que presentó pruebas fabricadas en un procedimiento relacionado con la policía y en su acusación personal por violencia contra la mujer. Además, se señalaron supuestas irregularidades en la utilización de recursos y abuso de poder. De acuerdo con fiscales contactados, la destitución de Muñoz Andrade tuvo lugar en el año 2010.
Este caso, que implicaba a Mendoza y Dent, se mantuvo abierto por más de cinco años y solo se resolvió a favor del hombre tras la destitución de la madre de Mendoza de su puesto y la consiguiente pérdida de sus influencias. Esto suscita preguntas sobre la imparcialidad del proceso judicial en ese entonces.
Finalmente, una vez concluidas todas las investigaciones, se presentaron cargos contra Bertha Michelle Mendoza por orquestar su propio secuestro involucrando a sus dos hijas. Tras evaluar diversos estudios psicológicos, se determinó que no era apta para su cuidado, resultando en la pérdida total de su custodia.